Puede que algunas de las que me estáis leyendo no hayáis oído hablar aún de esta maquilladora británica, pero quienes seguimos su trayectoria y conocemos su trabajo no hemos podido (ni querido) evitar caer en la tentación de hacerle un hueco en nuestros neceseres a los productos de su marca homónima.

Ha trabajado en pasarelas de Tom Ford, Prada y Alexander Macqueen, ha realizado editoriales para revistas de la talla de Vogue o Vanity Fair y ha conseguido hacerse con una cartera interminable de clientas celebrities que recurren a ella para eventos profesionales y apariciones públicas, como Kate Moss, Sienna Miller, Kim Kardashian o Amal Clooney, a la que incluso maquilló para su boda.

Vale que cuando tienes unas amigas tan famosas y tan comprometidas con la causa es mucho más fácil que el lanzamiento de tu marca sea un triunfo, pero para hacerla crecer y convertir tus productos en éxitos de ventas necesitas algo más. Y Charlotte, darlings, lo tiene.

Charlotte, que entiende el maquillaje como un arma para hacer que sintamos más seguridad en nosotras mismas, ha desarrollado su marca de acuerdo a esta premisa. Productos favorecedores y fáciles de usar, nada de colores extravagantes ni texturas propias de un disfraz de carnaval. Porque el maquillaje tiene que hacernos sentir bien potenciando nuestros puntos fuertes, no disfrazarnos.

En muchas de las entrevistas que concede, Charlotte suele mencionar la capacidad de empoderar a la mujer que tiene el maquillaje, y cuenta cómo comenzaron a tratarla de manera diferente cuando regresó a Ibiza, donde pasó su infancia, usando maquillaje después de haber estado en un internado en Londres. «La gente reaccionó de forma diferente a mí de inmediato. Estaban más alerta y eran mucho más atentos. Me hice popular de la noche a la mañana», relata. ¿No será que coincidió con el momento en el que entraste en la adolescencia y te crecieron las gemelas? Es sólo una idea, eh…

Pero volviendo a lo que nos ocupa…Una de las cosas que más me gusta de esta marca es que con pocos productos puedes lucir una piel espectacular: radiante, con el tan ansiado efecto glow, sin imperfecciones y sobre todo, con un aspecto natural. Para las que no nos hacemos maquillajes muy elaborados pero queremos salir de casa cada mañana luciendo nuestra mejor cara, esta marca es ideal. Por eso, he hecho una pequeña selección de sus mejores productos para este propósito.

Charlotte’s Magic Cream

Esta crema, en cuanto textura y olor, recuerda ligeramente a la clásica Nivea de lata de toda la vida, pero sus efectos en la piel van mucho más allá. Hidrata en profundidad, rellena la piel, la deja jugosa, llena de luminosidad y la prepara para el maquillaje. Su gran inconveniente es que de entrada no parece muy adecuada para pieles grasas, pero para las que la tenemos mixta, seca y sobre todo, deshidratada, esto es una maravilla.

En el envase, Charlotte da unas pautas de aplicación para mejorar la circulación y la producción de colágeno, así como reducir la hinchazón, pero yo reconozco que no tengo la paciencia suficiente para seguirlas. La aplico extendiéndola desde dentro hacia afuera y de abajo hacia arriba, e insisto dando un ligero masaje en la zona de los pómulos con las yemas de los dedos. Otra forma de usarla a la que he recurrido alguna vez es a modo de mascarilla hidratante, aplicando una capa gruesa y dejándo que la piel absorba lo que necesite. No recomiendo hacerlo antes de dormir porque la crema tiene SPF 15.

El efecto jugoso que esta crema deja en la piel es inmediato, por lo que es ideal para usar a modo de primer antes del maquillaje.

Su precio es de £70 libras, y el envase trae 50 ml.

Wonderglow Face Primer

En su página, Charlotte presenta este producto como una prebase que proporciona un efecto de belleza flash instantáneo que elimina todo rastro de fatiga y hace que la piel parezca mucho más joven y radiante. Recomienda usarla sola o bajo la base, a la que además le proporciona un extra de duración, aunque yo añadiría otro uso más: como iluminador líquido en los puntos de luz del rostro, o en aquellas zonas que se quieran resaltar. Por ejemplo, yo suelo aplicarlo en lo alto del pómulo y en el centro de la frente.

Proporciona un ligero brillo cálido dorado gracias a sus partículas casi imperceptibles, por lo que parece que es un brillo saludable que sale de la propia piel, pero sin que esta parezca grasa ni excesivamente brillante.

No hay nada que envejezca más que un rostro apagado y cansado, por eso Charlotte le da tantísima importancia a la luminosidad de la piel. Una piel radiante y luminosa siempre nos va a hacer parecer más bellas.

Yo el único inconveniente que le puedo encontrar es que Charlotte aún no se haya decidido a sacar más tonos.

Su precio es de £38,50 y el envase trae 40 ml.

Magic Foundation

A pesar de no tener una textura excesivamente densa, esta base es perfecta para cubrir todas aquellas imperfecciones que podamos tener en el rostro: marcas de acné, descoloracion, poros abiertos e incluso pequeñas cicatrices. Yo no tengo grandes problemas en la piel más allá de poros abiertos, tono desigual y alguna marca, pero tengo que decir que cumple lo que promete. Los poros se difuminan, el tono se iguala y las marcas quedan totalmente cubiertas. Por algo Charlotte la llama «milagro en una botella»…

Una de las cosas que más me gusta de esta base de maquillaje es que se siente muy ligera en la piel y proporciona un acabado totalmente natural. No deja un efecto tan radiante como su otra base Light Wonder, pero si queremos luminosidad ya tenemos la prebase que mencioné en el apartado anterior, o varios iluminadores, de los que hablaré próximamente.

Es de larga duración, y al menos en mi caso, que tengo la piel mixta, me aguanta perfectamente 12 horas sin necesidad de realizar ningún retoque.

Reconozco que es muy difícil que yo repita con una base de maquillaje que no sea la Double Wear de Estee Lauder, que llevo comprando más de 14 años. Soy muy exigente con este tipo de productos y pocas cumplen mis expectativas, pero ésta sin duda es una de ellas.

Está disponible en 15 tonos, su precio es de £29,50 y trae 30 ml.